Una carta, veinte rosas y un adiós, Lara Pastoriza
Aún te recuerdo perfectamente. Como para no acordarme de ti, siendo lo más hermoso y maravilloso que he llegado a conocer en la vida. Sé que ahora ya es demasiado tarde para escribirte esto,pero de alguna manera tenía que decirte que te amaba con locura . Cada día mi amor por ti era más y más fuerte. Recuerdo tus dulces sonrisas, aquellas que me alegraban los días, tardes y noches. Eras lo único en lo que podía pensar, y lo único que quería. Lo único. Y ahora estoy aquí, bajo la lluvia, delante le la enorme lápida que tapa tu tumba, escribiéndote esta carta y con un ramo de veinte rosas rojas. También recuerdo aquel día. Fue el día más horrible de mi vida. Cuando vi cómo te ibas, el mundo se desmoronaba ante mis pies. Contigo se me fue la vida y las esperanzas de seguir aquí, en este mundo , que carece de sentido porque ya no podré volver a sentir el roce de tus labios junto a los míos, porque ya no podré acariciarte ni verte nunca más. Todos los días me pregunto que por qué sigo aquí, porque sé que yo solo he vivido para amarte. Cada vez que te recuerdo, se me llenan los ojos de lágrimas y mi rostro se llena de un profundo dolor. Sé que nunca podrás leer esta carta, pero la dejaré aquí junto a estas flores y a todo mi dolor para poder estar ahí arriba, contigo, sin que nada ni nadie nos separe. Ahora mismo noto cómo el filo de este cuchillo va cortando mis venas, y noto cómo la sangre poco a poco va manchando mis manos y el papel de esta carta. Te amo mi princesa, por fin estaremos juntos. Para siempre.
Jhon.
Gústame moito
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ResponderEliminarSimplemente, perfecta.
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ResponderEliminarMuy bonita historia, preciosa.
ResponderEliminarMe gusta mucho, muy bonita
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